A los Mikel Iturriaga no les importan los niños pobres

Reservo el mayor de mis desprecios no a quienes son de izquierdas, que de todo hay en la viña del señor, sino a los progres, a quienes defino como aquellas personas con evidentes carencias morales que sustituyen el esfuerzo de mejorar por su adscripción ideológica. Un progre se considera a sí mismo una buena persona porque es de izquierdas y ve a los demás bajo el mismo prisma. Convierte su ideología en una bula que le exime de un comportamiento ético y de ver a quienes no comparten sus prejuicios como personas reales y no como villanos caricaturizados.

Un ejemplo paradigmático de progre es el showman de la sección de cocina de El País, el Comidista. Mikel López Iturriaga ha contestado en X a la candidata del PP Dolors Montserrat por criticar la política económica socialista recordando que hay medio millón de niños que no comen carne o pescado al menos una vez cada dos días. ¿La respuesta del pijo progre? Pues que la asociación yanqui de dietistas nos informa de que "las dietas vegetarianas, bien........

© Libertad Digital