El segundo intento de asesinato de Trump ya es página pasada en el libro de la actualidad española. La rápida evacuación de este asunto hay que ponerla en contraste con el prolongado despliegue de entusiasmo por la candidatura de su rival. No votamos aquí al próximo inquilino de la Casa Blanca —por qué no poner unas urnas de juguete para hacernos la ilusión de participar—, pero Kamala es nuestra candidata y nuestra gran esperanza, lo cual explica posiblemente la diferencia en el interés. Aunque puede explicarse alternativamente por la diferencia entre un intento de asesinato y un asesinato. Llevamos sesenta años hablando del asesinato de John F. Kennedy y no parece que se vaya a agotar nunca el tema. Pero no pongamos el mito a la........