La novena curul de la Corte Constitucional seguirá en suspenso por varios días. Claudia Dangond y Miguel Efraín Polo sacaron cada uno 50 votos. Además, apareció un voto de más. Los ruidos de fraude y saboteo forzaron a una nueva elección, aun sin fecha.

El gobierno Petro mostró que está jugado en esta elección y que tiene chance hasta en la cámara más hostil del Congreso: el Senado. Logró traer de su lado, es decir, al del candidato Polo, a senadores que en el papel estaban con Dangond, que está impulsada por la oposición.

Así fue el tras bambalinas de la sesión de hoy.

A las 10 de la mañana nadie sabía quién iba a ganar la elección de magistrado de la Corte Constitucional entre la terna conservadora que envió el Consejo de Estado. A diferencia de otras, donde hay un candidato cantado con apoyo mayoritario, en esta ocasión las fuerzas y los rivales, como el país, están polarizados.

El arranque lo marca el himno nacional. La costumbre en el Senado es cantar estrofas distintas en cada ocasión. La del turno de hoy, vino con un presagio:

“En Bárbula no saben

Las almas ni los ojos

Si admiración o espanto

Sentir o padecer”.

El espanto se padeció en las siguientes dos horas.

Después del himno, empezaron los presagios. “Dangond va 60 a 40”, dice un senador conservador. “10 arriba Polo”, responde uno liberal.

Claudia Dangond, la abogada conservadora tiene el respaldo del presidente del Senado, Efraín Cepeda. Miguel Efraín Polo, el exmagistrado auxiliar de la Corte, cuenta con el respaldo de los aliados del gobierno de Gustavo Petro.

El tercero, Jaime Tobar, no entró en las cuentas a boca de urna de nadie. Tenía el apoyo de Cambio Radical, su jefe Germán Vargas Lleras, y el liberal Alejandro Chacón. Pero Cambio Radical lo bajó de la candidatura a horas de la elección para impulsar la campaña de Dangond. Así, crearon un bloque para evitar que gane Polo, a quien le achacan la chapa del gobierno.

Polo no es petrista, es un confeso conservador que ha trabajado con cuatro magistrados diferentes de la Corte Constitucional. Trabaja en la Corte desde antes que existiera el petrismo. Pero tener el apoyo del gobierno lo matriculó allá.

La elección está polarizada entre los que creen que con él Petro va a lograr mayorías en la Corte, y los que creen que con Dangond la Corte seguirá haciendo contrapeso. En la práctica las dos lectoras son simplistas. La llegada de Polo o de Dangond a la Constitucional no representaría, de manera automática, una victoria o una........

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