Congos, garabatos y marimondas ya ambientan la fiesta. Ron y maicena se venden en cualquier esquina. Los turistas llegan de a miles. La celebración del Carnaval de Barranquilla moverá unos 600 mil millones de pesos, estima la Cámara de Comercio.
La fiesta se vive en los tradicionales desfiles de la vía 40, en las tiendas de barrio, en el bordillo del carnaval de la 44, en conciertos o verbenas. Quien lo vive es quien los goza, pregonan las emisoras. Los disfrutan muchos, pero solo unos poderosos tienen la influencia para definir el rumbo de una fiesta que tiene casi dos siglos de tradición.
“La organización del carnaval es un espacio dinámico de concertación entre intereses muy diversos. Una interacción de lo público-político, de los intereses comerciales, los intereses de participación y figuración de los grupos de carnaval y los intereses de los operadores de los eventos”, dice Jaime Abello, director de la Fundación Gabo y exmiembro de la junta de Carnaval SAS.
Este es un listado de las personas y organizaciones más poderosas detrás del carnaval.
Tiene poder público y empresarial. En su primera alcaldía (2008-2011), Char abrió un portafolio de estímulos para hacedores y operadores del Carnaval de Barranquilla. Es una política que se ha mantenido hasta la fecha.
De hecho, para este carnaval el alcalde entregó un portafolio de estímulos de 8 mil millones de pesos, 142% más que el año pasado.
El hacedor y organizador del Carnaval de la 44, Edgar Blanco, le dijo a La Silla: “Antes de Alejandro Char, hace 17 años, para que nos ayudaran con algo había que ir con un político, llevar una lista de votos y el político era el que autorizaba que nos dieran un billete. Le dijimos a Álex que estábamos mamaos y nos escuchó”.
Char también tiene la mayor influencia en la junta directiva de Carnaval SAS, una empresa mixta operadora de los eventos centrales del carnaval, pues la Alcaldía de Barranquilla tiene cuatro miembros en la junta y la mayor participación accionaria (48%).
Carnaval SAS toma decisiones importantes: elige la reina, les gira dinero a las agrupaciones carnavaleras, decide los horarios y lugares de los eventos y comercializa carrozas, palcos y publicidad con las grandes empresas, entre otras.
El alcalde llegó al poder con un carnaval ya programado, por lo cual su influencia más palpable en la junta se verá para el carnaval 2025. Char, en todo caso, es un mandatario muy presente físicamente en la fiesta, que asiste con su ropa carnavalera a los eventos más significativos, acompañado de su esposa, Katia Nule, exreina del carnaval.
Nule participó en una capacitación a reinas populares en la que, entre otras, se dio un taller de maquillaje profesional. También estuvo en la inauguración de la exposición en honor a las reinas en el Museo del Carnaval.
Además de ese poder, empresas de la familia Char, como el banco Serfinanza y los supermercados Olímpica, son aportantes a Carnaval SAS. Asimismo, a través de sus parlantes, la cadena radial Olímpica, también de los Char, es una de las principales animadoras de la fiesta.
Es la cabeza de la organización encargada de la mayor parte de los eventos del carnaval. Llegó al cargo en 2021 impulsada por el entonces alcalde Jaime Pumarejo.........