Aún continúa la digestión de los resultados en las elecciones catalanas al Parlament. ¡Y continuará! Una digestión que el estómago se la va a tomar con calma, porque hay mucha chicha que digerir y no conviene parar el proceso digestivo hasta pasadas las europeas. Las dispepsias serán flatulentas, tras ingestas de comidas fuertes, rápidas y estómagos no muy preparados para la ocasión. Con estos criterios, la digestión se hace difícil y pesada. Es lo que está ocurriendo con la composición del nuevo Govern de la Generalitat, tras los diabólicos resultados salidos de las urnas. Todo es cuestión de tiempo; ya lo tenía en cuenta Goethe al decir que el “campo del hombre es el tiempo”. El tiempo para que los catalanes tengan Govern va más allá de la fecha de las europeas, el 9 de junio.

Como a falta de pan, bueno son tortas, nos encontramos, tras el recuento electoral, con todo un galimatías para poder conformar un Gobierno, sin que los actores tengan mucho que decir. Y aún más difícil es que, si llegado el momento los........

© La Región