Casi una hora desgranando datos económicos positivos avalados tanto por institutos nacionales como por observadores internacionales y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no tuvo que responder a una sola pregunta sobre materias económicas durante la conferencia de prensa de balance de fin de año, más o menos como en las sesiones de control al Ejecutivo a las que el ministro de Economía, Carlos Cuerpo asiste como oyente porque a la oposición, lógicamente, no le interesa entrar en un ámbito en el que le pueden hacer menos daño que apuntando a los problemas judiciales que afectan a su entorno político y familiar.
Que la previsión de Pedro Sánchez sea dejar el déficit público en el 1,8% del PIB al término de la legislatura, o que España haya creado más empleo que Alemania y Francia juntas parecen asuntos de tono menor, porque al fin y al cabo lo menos que se puede pedir a un gobierno........