Tras la violación de los acuerdos de Barbados, principalmente por negar la celebración de elecciones libres y justas a raíz de las inhabilitaciones políticas, una larga lista de países han expresado su rechazo al autoritarismo y han decidido renovar la política de sanciones a Venezuela. Desde el gobierno nacional se ha respondido a tales señalamientos con expresiones como: “Venezuela es soberana” o “Venezuela exige respeto a sus asuntos internos” pero no han recurrido, sorprendentemente, al ejercicio del principio de reciprocidad.
Dado que soy politólogo de la República de Venezuela, es decir, estoy al servicio del país, más allá de mi gusto o disgusto con la administración actual, debo recomendar a la Cancillería algunas medidas que se me ocurren para que un país soberano ejecute, en el marco del principio de reciprocidad, contra aquellos otros gobiernos soberanos que han exigido el cumplimiento de los acordado en Barbados.
Dado que las sanciones contra el país son, en su mayoría, sanciones personales contra individuos, el principio de reciprocidad implica ejercer lo propio contra los individuos que ejercen cargos públicos en los países considerados agresores. En ese sentido, debe procederse con las siguientes medidas:
1- Prohibir a los ciudadanos norteamericanos Joe Biden, Donald Trump y Barack Obama, presidentes que........