Más de lo mismo: un Oviedo sin gol firma otro empate insuficiente ante el Celta (0-0) |
EN IMÁGENES: Así ha sido el encuentro entre el Real Oviedo y el Celta de Vigo / Miki López
Nacho Azparren
Quiere el Oviedo, que insiste e insiste y al que no se le puede reprochar la actitud. No esta vez. Pero no puede. Los ecos de una planificación defectuosa siguen pesando a puertas de enero, cuando se abre el comercio de pases invernal. Ya no es que al Oviedo le falte un goleador (Viñas es un gran delantero en muchos aspectos que no tienen que ver con esto), sino que esa capacidad de desbordar en el último tercio, esa chispa, ese detalle que en Primera gana partidos, no existe en el equipo. Desde ahí se explica otro empate, otro en el Tartiere y otro sin goles de un equipo, el Oviedo de Almada, con una correcta puesta en escena pero sin el premio más anhelado, el del gol.
La puesta en escena del Oviedo de Almada fue con novedades seguidas de una correcta presentación. Lo de las novedades se intuía durante la semana de prácticas en El Requexón e incluía un plan de rehabilitación exprés para los olvidados Bailly, Sibo y Brekalo. Con Cazorla esperando en el banquillo, y con el 4-2-3-1 heredado de toda la temporada. Resulta curioso........