Lara, ojo con sus volteretas

Mejor no lo pudo describir un gran amigo: si la política huilense tuviera como disciplina olímpica el salto con garrocha ideológica, Rodrigo Lara Sánchez tendría medalla asegurada. No por altura, sino por frecuencia. Ha cambiado tantas veces de partido, aliados y discurso sin despeinarse, que su electorado, a futuro, no sabrá dónde ubicarlo ideológicamente. 

Lara -quien heredó la tibieza de Sergio Fajardo- está agarrado nuevamente con la Alianza Verde, el partido político con el que lo identifican sus electores. Y no es para menos: lo desconocieron. Su nombre y menos su apellido no pesaron para que Diana Monje – su pupila- le ganara el pulso y organizara una lista a la Cámara de Representantes por el Huila, donde William Alvis, el abogado protegido por el hoy diputado, quedó por fuera. Se impuso el gobernador de Boyacá, Carlos........

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