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La captura de Édgar Rodríguez Ortiz, El Limones, secretario de organización de la Catem (Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México) en Durango y Coahuila, y al mismo tiempo operador financiero del grupo criminal Los Cabrera, da una pista sobre la corrupción sindical. El delincuente jugaba doble papel: por un lado, líder obrero, y por otro, extorsionador de comerciantes, ganaderos, transportistas y comercios. Su detención debería conducir a una investigación sobre el dirigente nacional de la Catem, Pedro Haces –quien ha negado toda relación con el detenido–, que abarque al líder de la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal. El año anterior, Monreal creó un cargo en la bancada morenista que no existía y se lo asignó a Haces: coordinador de operación política. El dúo dinámico gobierna casi sin oposición esa cámara del Congreso. La fiscal de acero, Ernestina Godoy, enfrenta cuestionamientos en el sentido de que sólo está persiguiendo a los enemigos del régimen. Hacer luz........