Que estamos en un mundo de locos, no tengo ninguna duda; que Colombia sobresale en locura, desde luego. Y qué decir de Venezuela... ¿Quiénes son los locos los que gobiernan o los gobernados? Luego de años en los que nos tienen acostumbrados a las más aberrantes chifladuras, se llega a un estado en donde no se puede distinguir entre cuerdos y alienados. Confieso que me estoy chiflando cada día más y veo con preocupación que si no le pongo estate quieto la cosa puede pasar a mayores. Algunos dirán que son los años, esos que nos hacen temer que nuestros cerebros dejen de estar en óptimas condiciones y quedemos expuestos a una u otra de esas enfermedades que tanto aterran a quien las llegue a padecer como a sus familiares.
No escribo estas reflexiones por haber leído recientemente “Siempre Alice”, la novela de Lisa Genova que fue llevada al cine con cierto éxito -como algunos de ustedes deben saber se trata del relato conmovedor de una mujer de cincuenta años a quien le diagnostican Alzheimer prematuro-. Ni tampoco porque ya a mi edad los olvidos se hacen más frecuentes que en el pasado. Sino porque he notado que los problemas mentales han traspasado el ámbito de lo privado y se han convertido en la marca de nuestro tiempo. Y no es para menos cuando los........