A veces, tengo la sensación de que no me puedo permitir estar mal. Eso puede que pase mañana, hoy, si alguien necesita que sea un ejemplo de fuerza antifascista, tendrá que disculparme.
Por FRANCHO AIJÓN*
Escribo esto porque ya no tiene sentido guardarme nada. Creo que es bueno que la gente también sepa que las familias nos rompemos, que estamos fuertes pero también jodidas. Y que aquellas personas que voten a opciones progresistas entiendan o sientan el dolor que supone que todos los mecanismos del Estado se hayan puesto al servicio de la peor idea de mundo posible: el fascismo. Solo así se entiende este proceso y ya otros anteriores, y los que vienen y vendrán.
Estos días he notado en mí un profundo desgaste físico y mental, y una absoluta desafección por los mecanismos del Estado. Tiene que ver con que no he visto esos famosos contrapesos del poder en este proceso de casi seis años —lo llaman pena de banquillo— y he........