Desde los años de la II Guerra Mundial, con la notable excepcion de Charles de Gaulle, la elite francesa y sus políticos más destacados apostaron al llamado atlantismo que se resume en confiarle la defensa del continente a los EEUU.
Para cualquier observador con dos sinapsis activas esto equivale a confiarle el gallinero al zorro. Sin embargo, durante más de 80 años el atlantismo ha formado parte de la caja de herramientas de la clase política gala.
La URSS y China primero, luego Rusia y una vez más China, son las pesadillas que perturban el sueño de unos y otros a pesar de que notables historiadores han descrito los siniestros esfuerzos de EEUU para someter a Francia y a Europa al poder........