La crueldad de los países ocupantes, de sus dirigentes y de sus esbirros es aceptada sin indignación por muchos. Aterra el genocidio de Gaza. Vemos que nadie lo para. No hay suficiente reacción. No se entiende que la condición humana y la política sean capaces de encajar lo inasumible. Nadie puede zafarse de su responsabilidad: las imágenes están ahí, dolorosas, impresionantes, insoportables.
A los presos políticos saharauis los conocemos por sus nombres, por sus caras, por sus historias. Disponer de detalles de su sufrimiento hace más elocuente su situación. Por eso hay que contarlo. Y hay que contárselo a Albares a ver si de una vez da el paso.
Él, que siempre está en el lado correcto de la Historia, debería pronunciarse y reaccionar.
Excmo. Sr. ministro de Asuntos Exteriores,
Unión Europea y Cooperación
Plaza de la Provincia
28012 – Madrid
Madrid, 10 de junio de 2024
Asunto: Aviso a navegantes: diez años por pedir la autodeterminación
Excmo. Sr. ministro,
Gaza, extenuada -con 37.000 palestinos asesinados, 84.500 heridos, 11.000 enterrados bajo los escombros, y todos sus habitantes al borde de la muerte por inanición-, sigue esperando medidas más eficaces contra los monstruosos ataques a su población. Una de ellas, el secuestro de armas que matan a niños palestinos o que han sido testadas contra ellos.
En Marruecos, el 6 de junio dos estudiantes saharauis han sido condenados a 10 años de cárcel en Agadir por su activismo universitario en pro de la autodeterminación. Se les acusa de violencia, de agredir a las fuerzas de ocupación, de obstaculizar la vía pública, no de pedir la autodeterminación. Los reos denunciaron tortura, pero el juez hizo caso omiso. No existían........