Estos últimos días de cada año no podemos evitar hacer balance de lo que hemos hecho, de lo que queríamos hacer y finalmente no hicimos, de los momentos de felicidad que de vez en cuando nos han iluminado, del sabor amargo del fracaso, del dolor, de la alegría, de las pérdidas y de los reencuentros, de los amigos nuevos y de las veces que, sin merecerlo, nos han perdonado.
No se trata de........