Cuando se empieza a escribir esta columna en papel (aquí no procede, lo sé) encuentras texto falso en la premaqueta. Ya saben, el famoso ‘lorem ipsum’, o una cita del Quijote. Lo quitas y empiezas a emborronarla con otro texto que puede ser falso si es fabulado, y que definitivamente no debe serlo si habla de algo real. Las palabras están aprisionadas en una caja que ustedes no ven (ver arriba la puntualización), y que........