Sin posición negociadora

La renovada amenaza sobre la gestión del agua del Ebro que plantea Cataluña no es más que otra evidencia de la pérdida de posición de Aragón en la agitada e insólita relación de fuerzas políticas de la presente legislatura.

No por errores o voluntad propia, la Comunidad se está viendo desplazada, como otras tantas autonomías, por culpa de la atención prioritaria que el Ejecutivo de Pedro Sánchez (PSOE-Sumar) presta a sus socios de referencia, quienes arropados por la oportunidad han emprendido una carrera peticionaria.

Si la posición negociadora de Aragón ante el Gobierno central era ya de por sí difícil, permanentemente condicionada por un desajuste (producto de la falta de peso poblacional) o por la ausencia de una política nacional cuidadosa con la solidaridad y la distribución interterritorial, no resulta complicado anticipar lo que puede ocurrir con........

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