De Chancay al mundo, una corriente imparable

Imagina un puerto que no solo transforma la economía de un país, sino que redefine las rutas comerciales entre continentes. ¿Podría un solo proyecto tener tanto impacto? El Puerto de Chancay en Perú promete ser precisamente eso: un catalizador de cambio y desarrollo para Perú y toda Sudamérica.

A un paso de Asia

Perú, un país con una rica historia y vastos recursos naturales, ha experimentado un crecimiento económico sostenido en las últimas décadas. Sin embargo, enfrentaba un desafío crucial: la modernización de su infraestructura portuaria para estar a la altura de las demandas del comercio global. En este contexto, surge el proyecto del Puerto de Chancay.

La necesidad de ampliar y actualizar los puertos peruanos se hizo evidente con el incremento del comercio internacional y la firma de tratados de libre comercio con países de Asia y el Pacífico. Al mismo tiempo, la congestión en el puerto del Callao, que manejaba alrededor del 90% de los contenedores del país, evidenció la urgencia de contar con una alternativa.

Fue entonces cuando Perú encontró en China un socio estratégico. A través de Cosco Shipping Ports, una de las mayores compañías navieras del mundo, se estableció una alianza que dio vida al proyecto. Con una inversión total cercana a los 3.500 millones de dólares, donde Cosco aporta el 60% y la peruana Volcan Compañía Minera el 40%, el Puerto de Chancay comenzó a materializarse.

La ubicación de Chancay, a 80 kilómetros al norte de Lima, no es casualidad. Este punto estratégico en la costa central de Perú ofrece una conexión directa con el mercado asiático, especialmente con China, y tiene el potencial de convertirse en un hub logístico para toda la región. ¿Te imaginas reducir en más de una semana el tiempo que toma enviar mercancías a Asia?

Un motor de oportunidades

Ahora bien, hablemos de cifras concretas. El Puerto de Chancay está diseñado para manejar más de 1,5 millones de contenedores TEU en su primer año de operación y proyecta alcanzar los 5 millones de TEU anuales en etapas posteriores. Esto lo posicionaría como uno de los puertos más grandes y modernos de Sudamérica.

Se estima que el puerto permitirá reducir en hasta 10 días el tiempo de tránsito entre Perú y Asia, pasando de 35-40 días a solo 23-25 días. Este ahorro en tiempo se traduce en una disminución significativa de costos. Consideremos, por ejemplo, que las mega naves tienen un costo diario promedio de 45.000 dólares y consumen aproximadamente 160 toneladas de combustible al día, con un valor de 450 dólares por tonelada. Reducir ocho días de navegación implica un ahorro de más de 936.000 dólares por viaje. ¿No es........

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