El que mucho ladra, ¿no muerde?

El primer trimestre de 2025 promete ser un periodo de alta volatilidad, marcado por políticas estadounidenses agresivas en temas económicos, migratorios y de seguridad nacional. Este ambiente generará una amplia cobertura mediática, que podría traducirse en impactos significativos a corto y mediano plazo sobre variables financieras y económicas, particularmente en México.

Uno de los primeros indicadores en reaccionar será el tipo de cambio, que históricamente ha mostrado sensibilidad extrema a eventos políticos y económicos de riesgo global. Pero, incluso el crecimiento económico, una variable trimestral y menos volátil, podría verse comprometida si las negociaciones entre ambos países no se manejan con pragmatismo.

La sólida relación comercial entre México y Estados Unidos podría convertirse en una moneda de cambio en estas negociaciones. Las tarifas comerciales emergen como la herramienta más probable de presión por parte de Estados Unidos, con el potencial de dañar el crecimiento económico de ambos países, independientemente de que existan o no medidas reactivas por parte de México.

Mientras que México representa el principal socio comercial de Estados Unidos con 15% de........

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