Primer round, primero

Faltan semanas, quizá hasta un par de meses, para poder valorar el resultado de la primera visita del titular de las finanzas públicas por el viejo mundo, y digo primera, porque es claro que en el primer intento no acabó de convencer. A los expertos financieros no les gustó la explicación que dio, particularmente en Inglaterra. Tras reuniones que dejaron un sabor de incertidumbre, han venido tronantes e inconvenientes declaraciones por parte de los políticos pertenecientes en Morena, que aún viven el frenesí electoral, y será hasta la cruda que entiendan que lo que dicen llega más allá de las fronteras, lamentarán entonces que no podrán desdecir lo dicho.

No han caído en cuenta de que todo el mundo afronta un estado de sobreendeudamiento, que pasará una amarga factura en varios países. La diferencia será que algunos sabrán sortear el temporal, mientras que otros se centrarán en repartir culpas. Pero el brusco ajuste está en ciernes. Es cierto que en México hay personas que aún creen que todo lo que pasa es culpa del pasado, y que las decisiones adoptadas en esta gestión son dignas de aplauso. Los legisladores siguen pensando que sus enjuagues parlamentarios superan todo cuestionamiento, y que el pueblo bueno entenderá cualquier cosa que pase como algo bueno, veremos. La lección que recibirán antes de que acabe el año, les enseñará que vivimos desde diciembre una crisis de deuda, y que tal escenario tarda en sentirse en el bolsillo, pero tarde o temprano, lo hará.

Hoy, parten del falaz supuesto que su mayoría les permite derogar hasta la ley de la gravedad, y sin duda, podrían arrollar, de llevarse el tema al pleno, pero la gravedad, ahí seguirá. Hacía ya siglos que en el país no se vivía un ambiente de frenesí, como el que ahora atravesamos. Cualquier candidato ganador hoy se engalla, y sale, junto........

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