Purgatorio

En dos días he pasado por el infierno, el purgatorio y el paraíso. Todo sin moverme de la ciudad, solo leyendo en el metro, paseando por el Born y abriendo el ordenador para informarme. Por suerte mía, y naturalmente sin haberlo premeditado, he empezado inconscientemente por el infierno, pero ya lo he superado. La editorial Raig Verd ha editado el sorprendente libro La dona de Déu, una novela que empieza con una sección titulada así, Infierno. Me la estoy leyendo en el metro y no la puedo dejar, es una novela adhesiva. Para disfrute mío ya he entrado en el capítulo Purgatorio. Leyendo tan concentradamente ya me he saltado una vez una parada de metro y he ido a parar donde no quería. Suele pasar, con la literatura buena. Qué bien que escribe la traductora y escritora griega Amanda Mikhalopulu y cómo se ríe seriamente del poder, la dominación, la soledad y los vínculos. Y todo con Dios como coprotagonista de una historia formidable, un mundo interior magnífico.

Abro la revista de fe y cultura America, y el tema central de la semana es una reflexión sobre el Purgatorio. Estamos en pleno siglo XXI y no........

© ElNacional.cat