Si algo ilustra el nuevo libro de David Madí, Merèixer la victòria, es que lo del procés cambió la mentalidad del país de arriba abajo y que es imposible volver atrás sin perder hasta la camisa. Se puede estar más o menos de acuerdo con las tesis de la ex-mano derecha de Artur Mas —siempre polémico y controvertido—, pero el libro sirve para visualizar cómo ni la cosa fue siempre hecha “desde abajo” ni Convergència se "transformó" en un partido independentista: hacía años que la mayoría de sus militantes ya lo eran. Simplemente, en el momento adecuado (por convicción, pero también, evidentemente, por interés, y sobre todo gracias a un inevitable —pero meticuloso— relevo generacional) la etapa post-tripartito se enfocó a canalizar la indignación general por la sentencia del Estatut y derivarla hacia un paulatino proceso de desconexión de España. No hace falta estar de acuerdo con Madí, evidentemente: pero lees el libro y te das cuenta de lo muy atrás que hemos ido, por culpas ajenas y propias, y, por lo tanto, las camisas que hemos perdido.
No descubro la sopa de ajo, diciendo esto. Absolutamente todos los líderes independentistas que se presentaban a estas elecciones europeas son conscientes de que sin un........