Aunque se diga con la boca pequeña, Catalunya es el gran tema de las elecciones europeas en la circunscripción española. La alegría socialista por la victoria de Salvador Illa es un reclamo electoral contra el PP, pero va cogiendo, poco a poco, un regusto amargo. Pedro Sánchez se encuentra en una posición inmejorable para atraer a los votantes de Núñez Feijóo y convertir al PSOE en el nuevo partido Alfa del Estado. Pero, aún y así, hay una desazón indefinible que atraviesa todos los partidos, excepto VOX.
El partido de Abascal no para de recibir apoyos internacionales, pero todo el mundo sabe —o intuye— que es porque la extrema derecha española no es exactamente como el resto de extremas derechas europeas. Por más que Iván Redondo asocie el peligro nazi con Alternativa por Alemania, el único peligro nazi que queda en Europa, si se quiere decir así, se encuentra en España,........