Así como la amnistía se resiste a la mayoría de protagonistas del procés, parece que la judicatura española ha tenido un ataque de celeridad a la hora de indultar a los cuarenta y seis policías investigados por las cargas del 1-O en Barcelona. En nombre de aquello que los socialistas denominan la "normalización política en Catalunya", el juzgado número siete de Barcelona ha liberado a decenas de agentes que defendieron la unidad de la patria a base de unas patadas que el lector tendrá bien presentes en la retina. La toga amnistiadora del caso ha aducido que sus acciones no llegaron a superar "el umbral de gravedad necesaria" para considerarlos delitos contra la integridad moral y los derechos humanos. Curiosa lectura de la Carta Magna Planetaria, aquella por la cual hostiar a la gente mientras vota no lesiona ninguno de sus derechos fundamentales.
A pesar de haberse mostrado contrario a la ley de amnistía, el sindicato mayoritario de la policía española, Jupol, se ha mostrado encantadísimo con la resolución. Los fundamentos argumentales de la pasma son bastante........