De María Santísima a María Corina |
La historia generalmente la escriben los vencedores, exaltando proezas reales o imaginarias, edificadas sobre osamentas de los débiles y oprimidos. La tragedia de Jesús de Nazaret y María, su madre amantísima, no fue la excepción; sin embargo, escasean personajes que alcanzan su estatura espiritual: no lideró ejércitos ni ocupó cargos terrenales, su renombre no proviene de imposiciones ideológicas, sino del amor incondicional de la maternidad vivida en una época donde las mujeres no tenían espacio en la vida pública, soslayando la ‘Grandeza de lo Pequeño’: 2.000 años después, María continúa siendo faro para creyentes y no creyentes, centro espiritual inamovible del........