Durante mucho tiempo abogué por que Cartagena contara con una Secretaría de Turismo. Para sustentarlo escribí varias columnas de opinión e informes periodísticos en los que expuse argumentos razonados. Nunca entendí que el destino turístico más importante y anhelado de Colombia, elevado a Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad por la UNESCO y declarado Distrito Turístico de Colombia, no tuviese un ente rector de su principal renglón económico y el más destacado proveedor de empleo.
No visioné nunca una entidad burocratizada y estática, sino una estructurada y capaz de organizar el sector y ejercer la autoridad que requiere un destino de fama internacional........