El drama político protagonizado por Samuel García ha mostrado el lado autoritario e irresponsable de la clase política mexicana. Movimiento Ciudadano, como Morena, se han presentado en el escenario político como una alternativa a la vieja política mexicana, a la que identifican como corrupta y arbitraria. El partido de López Obrador, sin embargo, se conforma hoy por los mismos políticos de antaño: su estrategia fundamental —desde que dirigió el PRD— ha sido abrir los brazos a panistas, priistas, petistas y pseudoecologistas por igual, siempre que representen un rédito electoral. Un artículo reciente de Forbes señala que casi la mitad de los gobernadores de Morena militaron en el PRI, algunos hasta por 35 años. A principios de año, más de dos mil panistas en Tamaulipas renunciaron al PAN para incorporarse a Morena. Además, diariamente nos enteramos de nuevos casos de corrupción y de excesos en los gobiernos de Morena. No hay nada nuevo ahí.
Ahora, Movimiento Ciudadano, que........