La ingenuidad de Bonilla

El juicio contra los exministros de Petro, Ricardo Bonilla y Luis Fernando Velasco, es otro proceso más al meollo histórico de la corrupción política colombiana: la transacción del voto legislativo a cambio de recursos públicos, disfrazada de “gobernabilidad”. (Le puede interesar: ¿Se equivocó Abelardo?).La lucha contra los auxilios parlamentarios de la Constitución de 1991 ha sido la más perdida de sus batallas. Los auxilios mutaron en cupos indicativos, fondos de cofinanciación o partidas de desarrollo regional. La lógica permaneció intacta: partidas presupuestales orientadas por congresistas para enriquecerse ilícitamente, fortalecer su poder político y asegurar apoyos electorales. El pork barrel criollo.La Corte Constitucional ha sido clara en distinguir lo permitido de lo prohibido. Es legítimo que los congresistas gestionen recursos para sus regiones; es constitucional que propongan partidas presupuestales siempre que estas respondan a criterios de planeación, legalidad,........

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