Sensatez
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26.04.2024
Es más fácil entender el estallido social que las marchas gigantescas del domingo. Es más fácil ponerse del lado de la furia de los ninguneados que de la indignación de los defensores de las instituciones. Cuánto nos costó, a este lado del espectro, comprender las razones del no a los acuerdos de paz. Hasta cuándo resolveremos los debates con estigmas: “Uribistas”, “bodegueros”, “privilegiados”, “clasemedias”, “vándalos”. Podríamos quedarnos, en fin, en un retrato mezquino e ilusorio de la procesión blanca del 21 de abril. Y, sin embargo, es un deber social –una tarea pendiente acá en Colombia– escuchar todos los gritos: calzarse las vidas ajenas, tragarse los argumentos ad hominem, convertir las caricaturas en personas, recobrar aquella flexibilidad de la inteligencia que suele llamarse sensatez.
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Hay que leer con calma este país. Hay que recordar que los protagonistas de........
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