Son las seis y cuarto de la mañana, aún es noche cerrada, pero ya empiezan a llegar vecinos a las puertas de los centros de salud en Andalucía. Son decenas de ciudadanos en cada centro que esperan que den las 8 de la mañana y se abra la puerta. Son personas mayores en su mayoría. Su objetivo, conseguir una cita médica. No lo han logrado ni a través de Salud Responde ni llamando por teléfono al consultorio ni a través de la aplicación móvil.
Son las colas de la desesperación, del dolor, de la incertidumbre…, de pacientes que aguardan desde mucho antes de salir el sol, en la puerta de su centro de salud para suplicar una cita con el médico de cabecera. Esta es la terrible situación que vive la sanidad pública andaluza, que cada día va a peor, con Moreno Bonilla.
Una madre me contaba por redes hace unos días que, fue al mostrador para pedir una cita médica para su hijo adolescente a las diez de la mañana y ya solo le ofrecían dos opciones: una cita telefónica para dentro de quince días o una cita presencial para dentro de dieciocho.
Y es curioso, porque no hay citas, pero muchos centros de salud están casi vacíos durante buena parte del día. ¿Y por qué ocurre esto? Pues porque faltan médicos. Y faltan facultativos porque Moreno Bonilla no los contrata. Por esto no hay citas y por esto se han abandonado programas de salud que se deberían prestar: control de embarazo, diabetes, educación para la salud o prevención. No se atiende la salud de los andaluces, sencillamente porque el presidente........