Periodista
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El vendaval de nuevas emociones que experimentamos a diario evitará que dediquemos tiempo a profundizar en las causas y consecuencias de aquella ausencia que tanto llanto motivó. Esa pena irá atenuándose, pero será inevitable volver a ella años después, con la sapiencia y experiencia necesaria para calibrar su trascendencia y entender por qué fue que reaccionamos ante ella de tal o cual manera. Podremos conocernos mejor a nosotros mismos calibrando la influencia que esas experiencias tuvieron y cómo es que han ido moldeando nuestra personalidad. Recordarlas........