Opinión | EL ÁNGULO
Carmen Lumbierres
Pedro Sánchez sale del hemiciclo del Congreso de los Diputados, el pasado 26 de junio. / JOSÉ LUIS ROCA
Si algo ha definido el verano ha sido el silencio desde Moncloa. Hermetismo en las negociaciones con ERC para gobernar la Generalitat, indefinición sobre el concierto económico y hasta los últimos días de agosto, con la gira africana del presidente del Gobierno, no escuchamos por primera vez una respuesta a las propuestas de deportación masiva, al intento de manipulación de la autoría del asesinato de un niño, a la vinculación de inmigración y delincuencia.
Sánchez salió de manera confusa de este asunto lleno de pólvora electoral, alabando las bondades........