Opinión | EL TRIÁNGULO
Carmen Lumbierres
Helado / Pixabay
Hay demasiadas expectativas generadas sobre el verano, a no ser que tengas menos de 25 años y vivas en la estrecha franja del norte que no supera los 30 grados. Para el resto, supone encierro hasta la noche en la que pisar la calle a una temperatura que era casi la del día de nuestros veranos infantiles.
Cada vez hay más digresión entre lo que esperas y lo que sucede, de la playa que anhelas a la que ves la separan unos cientos de personas, aquellas que tienes que saltar para encontrar un hueco de solaz y relajación. Los hoteles no son iguales en las fotos que llenos de gente en las tumbonas o el desayuno, y el Partenón griego a 40 grados........© El Periódico de España