Venezuela y después China |
La escalada de la agresión estadounidense a Venezuela parece incontenible, mientras se acumulan las ejecuciones extrajudiciales en el Caribe y en el Pacífico. Las amenazas suben cada vez más de tono y los bloqueos naval y aéreo se intensifican con el correr de las horas. Se trata de medidas que violan la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional, pero Trump y sus secuaces parecen decididos a todo. Habrá que ver, no obstante, si con una invasión quieren crear su propio Vietnam o su Afganistán; en otras palabras, si son tan estúpidos como para ocasionar otro incendio pero esta vez no en tierras lejanas sino en el antejardín de los Estados Unidos.
Los gobernantes europeos, autoproclamados defensores de los Derechos Humanos, la Democracia y la Justicia, consienten con su silencio los crímenes de guerra que ya ha cometido la Casa Blanca en relación a Venezuela. Otros gobiernos, como el de la Federación Rusa y la República Popular China, han expresado cada vez con más fuerza su desaprobación de la conducta de Washington y reiterado que ambos países mantienen una “asociación estratégica integral” con el gobierno bolivariano. Pero en el caótico círculo áulico de Trump el Secretario de Estado Marco Rubio (foto), hombre de turbios antecedentes, receptor........