Imaginémonos una América distinta en diciembre del año 2025. Venezuela es la segunda democracia más antigua de Sudamérica, ininterrumpida desde 1959. El teniente coronel Hugo Chávez, quien intentó destruirla mediante el golpe fallido de 1992, estuvo preso por sus crímenes hasta el año 2010 y falleció por causas naturales tres años después. La economía venezolana aún depende de las exportaciones petroleras, pero sus presidentes del siglo veintiuno no atentaron contra el aparato productivo, conservando los pujantes sectores manufactureros, turísticos, culturales y agrícolas de una Venezuela mejor. Hoy en día, el venezolano promedio goza de ingresos semejantes a los de Chile o Uruguay. Camina seguro por sus calles y campos, libres de los colectivos chavistas, el Tren de Aragua, o las guerrillas de las Farc y el Eln. Nueve millones de venezolanos más viven en su país, y los que deciden irse lo hacen para buscar nuevas oportunidades, no por el terror, la persecución política o la........

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