En estos días celebramos el tradicional día de la raza, el mismo que los hispanos de EE.UU. celebran durante un mes con variadas actividades exteriorizando el orgullo por su raza mestiza, mientras que en países hispanoamericanos gobernados por la izquierda como México y Colombia irónicamente se “celebra” con decisiones gubernamentales que denotan, en el primer caso torpeza diplomática y en el segundo un reconocimiento a los movimientos identitarios: Claudia Sheinbaum decide no invitar al Rey de España a su posesión y Petro hace más de un año quiso renombrar el 12 de octubre como el “Día de la Diversidad Étnica y Cultural”, como si nuestro mestizaje étnico y, en menor medida, cultural, nunca hubiera ocurrido. En otras palabras, con ese cambio de nombre Petro, una vez más, promueve la fragmentación social que tanto le agrada y no la unidad nacional. En fin, pareciera que los líderes “progresistas” no han leído la abundante literatura que en las últimas décadas ha desenmascarado la “leyenda negra” construida contra la hispanidad.
Dicha distorsión de la historia se sustenta en tres pilares. En primer lugar, hay quienes sostienen que en la américa descubierta por España ya existían estados nación prehispánicos como........