Reconozcámoslos... y avanzaremos

Todo empezaría a cambiar cuando los tolimenses reconozcamos tres fenómenos que nublan el horizonte progresista. El primero, aún no reconocido explícitamente, es la decadencia del Tolima, decadencia que vengo insistiendo, inició en los años ochenta del siglo anterior y que, es irrefutable, hoy se expresa en gobiernos y cacicazgos egocéntricos y mediocres, en grave y creciente deficiencia de infraestructura, en corrupción, en declive empresarial, en ingentes problemas sociales y, así lo creo, en una mentalidad de supervivientes y no de forjadores de futuro. Como la del pobre........

© El Nuevo Día