Como se define popularmente y además aún no entendemos que, por no diferenciar las dos conceptos, con nuestros votos favorecemos esa politiquería que por muchos años sumió y continua sumiendo al Tolima en el atraso, atraso que hoy algunos ingenuos o proclives al mal atribuyen a la falta de inversión del gobierno central, olímpica forma de esquivar la responsabilidad de convocar a definir y acordar la ruta del desarrollo tolimense y de liderar su cumplimiento, tarea que es contraria a contemporizar con el politiqueo ahistórico y anacrónico. También debemos saber que, por ausencia de genuina política, la unidimensional politiquería, aun ejercida por gente decente, resulta inocua o ineficaz, pues lejos está de ser el efectivo instrumento que permite alcanzar peso........