La situación actual en Medio Oriente es un enorme desafío para las potencias militares Occidentales; desafío que se refleja en posiciones ambiguas. Por un lado reconociendo el derecho de Israel a defenderse y a su existencia, pero por otro lado tratando de restringir este derecho con pretensiones de derecho humanitario.
Es imposible que Israel pueda vivir en paz mientras esté rodeado de enemigos que quieren destruirlo a todo costo, y de paso a todo Occidente. Para Irán y sus aliados, Occidente es el Gran Satán y los infieles deben ser aniquilados; para ellos es una guerra santa. El líder máximo iraní suele decir que muerte a los Estados Unidos no es un eslogan sino una política de estado. No es posible que Israel pueda sobrevivir si le llueven misiles y drones prácticamente de todos lados. Para Israel, y sobre todo después del cobarde ataque........