Antes de esta fecha de navidad, estuvo la fecha del calvario… La tarde avanzaba imparable mientras las tristezas daban verdor dentro del alma a la flor de la esperanza. Hasta el madero se llenó de nuevos retoños, se propagó el aroma de las flores como si fuera tiempo de primavera. Aquella tarde de crucifixión poco a poco se iba incendiando el paisaje en fugaz poesía, bajo el diáfano tinte de ardientes colores…

Uno aprende que el canto de la vida llega cuando se alivian las cargas, cuando nos rodea el cálido abrazo, el compartir con la familia las alegrías, momentos de grata calma, justo el instante en el que cuando estamos solos, la realidad nos enseña que el arte de vencer consiste en estar rodeado de placeres apacibles. Brindemos por el niño de Belén, por la nochebuena que se acerca y por el año que va pasando a formar parte de los muertos. “Brindemos por el año que comienza, porque nos traiga ensueños, porque no sea su equipaje un........

© El Impulso