Son muchos los desafíos que la mujer ha afrontado a lo largo de la evolución de la humanidad. Relacionar el ser mujer, la inteligencia emocional y la prevención del suicidio resulta relevante dada su connotación con la salud mental y el bienestar integral de la sociedad en su conjunto.
La capacidad de las mujeres para desarrollar y aplicar la inteligencia emocional no solo tiene un impacto directo en su salud mental individual, sino que también puede influir en la dinámica familiar, las relaciones interpersonales y la cohesión social. Además, reconocer la importancia de estas conexiones puede ser fundamental para implementar estrategias efectivas de prevención del suicidio, no solo entre las mujeres, sino en toda la comunidad.
La inteligencia emocional en las mujeres se refiere a su capacidad de identificar, comprender y gestionar adecuadamente sus propias emociones, así como las emociones de los demás de forma efectiva. Esto implica una sensibilidad y conciencia emocional que nos permite navegar por las complejidades de las relaciones interpersonales y situaciones emocionales de forma hábil y constructiva.
De ahí que, en la compleja........