Consenso y unidad |
Colombia atraviesa un momento de tensiones profundas. Las diferencias políticas se han vuelto personales; las opiniones, trincheras. Conversaciones cotidianas terminan en silencios incómodos o discusiones sin retorno. Nos estamos viendo como enemigos, incluso antes de escucharnos. Como psicóloga, observo con preocupación cómo los vínculos sociales se desgastan y cómo el tejido emocional de la nación se fragmenta en la vida diaria.
Sin embargo, creo que este es un tiempo fértil. La crisis, bien leída, es oportunidad. Y el llamado que hago es sencillo, pero profundo: recuperar el sentido de consenso y unidad, no como uniformidad ni rendición de ideas, sino como la capacidad humana y ética de sostenernos juntos, incluso en el disenso.
Desde la psicología sabemos que el ser humano no se........