Vino la gente de Invías a visitar el terreno donde ubicarán las proyectadas obras para contrarrestar el embate de las olas que significan una inminente amenaza de destruir la calzada de la carretera a Ciénaga. Se trata de dos viaductos que, al decir de los entendidos, son en extremo costosos pues el problema podía resolverse con alguna solución más simple y económica. Empero, tampoco es cosa de protestar porque la nación te proyecte obras costosas, a caballo regalado no se le mira el diente, y menos si se tiene en cuenta la cujidería nacional para lo que a las obras en el Atlántico se refiere. Claro, el caballo no ha llegado, se trata de una........