Suez y Panamá encogieron el mundo (I) | Columna de Ricardo Plata Cepeda

La caída de Constantinopla en 1.453 a manos del sultán Mehmed II, “El Conquistador”, cerró para los europeos los accesos marítimos y terrestres a Asia, en particular al tramo entre Alejandría y el Mar Rojo. España y Portugal, entonces avezados navegantes, hicieron apuestas de largo aliento por rutas contrarias. Portugal navegando hacia el oriente, habiendo comenzado con el príncipe Enrique “El Navegante” a explorar la costa africana, en 1.488 Bartolomeu Dias logró dar vuelta a ese continente por su punto más al sur, el Cabo de Buena Esperanza, y comenzar a navegar por su costa oriental.

España, confiando que la........

© El Heraldo