La Provincia vive | Columna de Miguel Vergara

Recuerdo de mi infancia los días en que la telenovela Escalona invadía las pantallas de todo el país. A través de ella, comencé a conocer las canciones del maestro Rafael Escalona, y fue el gran Egidio Cuadrado, con su inigualable acordeón, quien nos condujo por esa historia con cada nota. Fue allí donde descubrí y me enamoré del vallenato. Por eso, la partida del maestro Egidio me llena no solo de nostalgia, sino de gratitud hacia esa figura sencilla que, con su instrumento, nos transmitió el folclor de la provincia.

Aunque no era el acordeonero más reconocido de su generación y residía en Bogotá, lejos del Valle y sus festivales, el destino tuvo a bien unir en una parranda a esa dupla que impactaría para........

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