Brasil: aún no expone, con la regularidad de otrora época, aquel juego reconocido y admirado por el mundo del fútbol, aquel de la magia, la inventiva, la armonía colectiva. Aquel con la simple alquimia de la calle. Pero Vinicius, Rodrigo y algún otro aparecen como “morosos mensajeros del individualismo”, con cuatro o cinco fugaces y desequilibrantes arranques son capaces de lastimar al rival.
Uruguay: el ‘Bielsismo’........