Delménico se escapaba de su área, en algunas ocasiones con un punto de temeridad que sazonaba su gusto por el riesgo, dominaba el esférico y aumentada la emoción en las tribunas. Caso infrecuente para un portero, los hinchas iban- íbamos- al estadio Romelio Martínez a ver jugar a Delménico y sus travesuras poéticas que daban la sensación de abismo, pero emocionantemente estético.

El ‘capi’ Berdugo era la imagen del defensa sólido, impasable , y........

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