«En mi infancia solo conocí dos días especiales para agasajar personas: el Día de la Madre y el Día del Maestro», escribió mi papá en su agenda de 1998 en donde, como ha sido costumbre suya desde que recuerdo, todos los días de todos los años narra experiencias cotidianas de su vida y de la de otros; no en balde, es sociólogo de profesión. Como inicia esta columna, inicia la página del domingo 14 de junio de ese año en que Francia se coronó campeón del fútbol mundial en París.
«Del primero, los símbolos que guardo en la memoria son el del privilegio de llevar junto al pecho un clavelito rojo con el significado de mi madre viva; y el........