Creer que nada pasará. |
Uno de los libros de negocios que más me gustó a través de los años, es un libro ya bastante viejo (1997), escrito por Andrew Grove; quien fuera presidente de Intel y uno de sus mayores protagonistas a través de los años. El libro se llama “Sólo los paranoides sobreviven” y como su nombre lo sugiere, se refiere a la paranoia que deben “sufrir” los buenos directivos, entendiendo por esa paranoia una especie de hipersensibilidad a las señales de amenaza o de cambio que se deben percibir en el entorno y no quedarse demasiado cómodo en su posición.
Estar en modo paranoico implica estar siempre en alerta respecto a qué puede amenazar nuestras posiciones en el mercado y prepararse para adaptarse y reinventarse.
Uso esta intro como especie de metáfora para echar sal en una herida.
Hace algunos días un precandidato presidencial que visitó Pereira, en una reunión con empresarios, tras plantearle nuestras preocupaciones por la inseguridad y el nivel de homicidios que se presentan en la ciudad, nos señaló muy respetuosamente respecto a esto: “Ustedes no pueden mostrar, por un lado, preocupación por la violencia que genera el narcotráfico y, por el otro, hacerse los de la vista gorda con la cantidad de dinero que ingresa a esta región producto de esa misma actividad”.
Y vaya si nos cayó como agua fría el comentario. Literalmente, todos nos quedamos callados. Como quien dice… “no lo habíamos visto así”.
Hoy, lunes 22 de septiembre, momento en que escribo esta columna, el Diario La República publicó un artículo que habla de un estudio que a su vez publicó el docente........