Elogio al empresario/empresaria

Cuando se menciona la palabra empresario/empresaria, por experiencia personal o por haber tenido la fortuna de lidiar con ellos, de manera directa, constante y diaria, durante ya más de tres décadas, lo primero que me viene a la cabeza, es definirlos con una palabra que engloba todo su quehacer y que es con letras mayúsculas, VALENTÍA, entendida como la acción material o inmaterial, esforzada y vigorosa, que en muchas ocasiones parece exceder a las fuerzas naturales personales. No es fácil aventurarse en la creación de una empresa, definida como unidad de organización, dedicada a actividades industriales, mercantiles, prestación de obras o servicios, con fines lucrativos.

En primer lugar, porque es una apuesta personal y en la mayoría de los casos familiar, para emprender una actividad económica, que va a tener una incidencia global, en su vivencia individual, íntima o subjetiva. Además, servirá para engrandecer el entorno comunitario, creando una diversidad de labores interactivas, que engrandecen,........

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